Wine para ejecutar programas Windows en Linux
Wine permite ejecutar programas hechos para Windows en el sistema operativo Linux, siendo una alternativa al uso de una máquina virtual o al uso de ambos sistemas en distintas particiones del disco duro. Wine tiene la ventaja de alcanzar un mejor rendimiento que con un emulador, y además no requiere de la instalación de Windows, por lo tanto no requiere de la compra de una licencia.
El objetivo del proyecto Wine es que se puedan ejecutar la mayor cantidad posible de programas y juegos desarrollados para correr en Windows, que no dispongan de versiones para Ubuntu o para alguna otra distribución de Linux que se tenga instalada en el PC, aunque todavía existen muchas aplicaciones que no son compatibles.
Para instalar una aplicación a través de Wine se debe disponer de la imagen ISO o del ejecutable (.EXE) del software o del juego que se quiera ejecutar en Linux; desde el panel de configuración de Wine se debe seleccionar alguna de las opciones listadas en “versión a imitar” (ya sea Windows XP, Vista, 7 e incluso ediciones anteriores), y luego se debe pasar a instalar el programa o el juego tal cual se hace en Windows.